Ciudad de México
Del 15 al 19 de octubre, el puerto de Acapulco recibirá la Feria Internacional del Libro, teniendo a Argentina como país invitado de honor. Se trata de una apuesta por llevar los libros y la lectura a una ciudad considerada sinónimo de fiesta, al grado que existen muy pocos espacios para su difusión: en todo el ayuntamiento solo se cuenta con dos librerías, de Educal y Porrúa, las demás son puntos de venta en tiendas de autoservicio o en papelerías.
“Formales hay dos librerías, que no son tiendas departamentales y que no son restaurantes que venden libros. Hay papelería que venden libros, pero como tal sólo están Educal y Porrúa, por lo que se trata de una oportunidad para que más títulos lleguen y, sobre todo, para que la gente se entere de las novedades editoriales y escuchar las propuestas de los autores”, en palabras de Iris García Cuevas, directora del encuentro editorial.
La Feria tiene como país invitado de honor a Argentina, de ahí la presencia de como Andrés Neuman, Alan Pauls y Leila Guerriero, además de las conmemoraciones por el centenario de su nacimiento a Julio Cortázar y Adolfo Bioy Casares, a quienes se sumarían los de los mexicanos José Revueltas, Efraín Huerta y Octavio Paz.
De acuerdo con Gabriel Brito, director de Fomento a la Cultura del Ayuntamiento de Acapulco, todo es parte de un programa de animación cultural y de creación de públicos, en donde se apuesta por ejercer la cultura como un derecho en la ciudad y como una herramienta para la recuperación de los espacios públicos, para la recuperación de la confianza de la ciudadanía y de los turistas.
“Creo que es una oportunidad para conocer títulos, programas editoriales y autores que difícilmente llegaban a una ciudad como Acapulco, estigmatizada como una ciudad de playa, de fiesta, y la verdad es que allí tenemos autores importantes y una historia literaria que también tiene algo qué contarle al resto del país y al mundo, por lo que la pensamos como una plataforma para exponer el trabajo de nuestros autores y recibir a autores que pudieran intercambiar sus ideas, sus puntos de vista y su trabajo con nosotros.”
El año pasado, la Feria Internacional del Libro de Acapulco recibió a 15 mil visitantes, durante sus cinco días de actividades, por lo que se espera superar ese número, en especial con la participación de las escuelas, porque lo más importante es llegar al mayor número de posibles lectores, en palabras de Iris García Cuevas, directora del encuentro editorial.
“Pensemos que somos una ciudad en la que hay muy pocas librerías, hay una oferta cultural escasa y justo lo que se busca es que los libros lleguen a la gente, que vean la posibilidad de la lectura como una alternativa de esparcimiento y de crecimiento personal, donde puedan tener disponibles los libros y conocer a los autores y enamorarse a través de la voz de ellos, de la lectura.”