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ÁLAMO
Habitantes de la comunidad La Habana recibieron muy complacidos los tinacos que el gobierno municipal consiguió para satisfacer la demanda de familias que con urgencia los necesitaban, dado que la sequía por dos años consecutivos causó un desabasto sin precedente.
Don Eligio Hernández uno de los beneficiados, indica que siempre quiso tener un tinaco en casa pero que su alto costo siempre se lo ha impedido; hoy, sin embargo, visiblemente satisfecho, les pide a sus nietos que lo lleven a su casa y que lo instalen.
Oriunda de Ojital Ciruelo, Aurora Hernández al recibir el apoyo municipal nos dice que el tinaco le llega a la familia como anillo al dedo, pues ahora podrá almacenar el agua ya que solo contaban con dos cubetas y una palangana para ese propósito.
Vecinos de la comunidad El Esfuerzo coinciden en afirmar que la mayoría de los habitantes de ese poblado han adquirido la cultura del agua pues la almacenan lo más posible, porque, aunque cuentan con agua entubada, no siempre se da el servicio y refiere que, al tener un tinaco, el problema de desabasto se resuelve satisfactoriamente.
En la comunidad de La Habana se congregaron personas beneficiadas de esa zona y el alcalde Jorge Vera Hernández, guardando la sana distancia, refirió que existe un problema económico a causa de la pandemia y que el gobierno municipal, ha puesto en marcha el programa de los tinacos con la finalidad de colaborar con los habitantes del municipio en estos momentos tan difíciles.
Sobre el tema de los apoyos municipales, el alcalde refirió que están por establecer dos biofábricas y se impulsa la siembra del maíz “hojero” para que los agricultores obtengan doble beneficio ya que además de las ganancias del grano, podrán vender a buen precio la hoja para los tamales.