Provocaría más contagios por la afluencia nacional y local.
Sabino Bautista Juárez.
PAPANTLA
Custodios de la zona arqueológica de El Tajín temen la pronta apertura del lugar, lo que traería consigo una oleada de contagios de covid-19, porque nada más en un domingo reciben entre seis y ocho mil visitantes nacionales y extranjeros.
La llamada "nueva normalidad" podría terminar con la "cuarentena" de dicho centro ceremonial, que es punto de concentración de miles de personas que viajan, principalmente, en grupos de más de diez integrantes.
Estadísticas de la zona arqueológica hacen notar que de manera tradicional y sin pandemia, de lunes a jueves entraban entre 80 y 200 turistas; viernes y sábados de 800 a dos mil. Los domingos, que son de entrada libre, se contaban de seis a ocho mil visitantes.
Con la llegada del verano todos esos números serían superados con mucha facilidad, pero a la par de una reactivación económica del comercio regional, también subiría más la curva de contagios de covid-19, que cifras conservadoras del gobierno del estado confirman unas 30 defunciones a causa de la enfermedad, y supera los 100 casos positivos.
"Nosotros seguimos laborando con todas las medidas de sanidad, y nos agrada que la gente venga y admire nuestra cultura, pero esta vez el impacto podría ser mortal", dicen desde el anonimato custodios de El Tajín.