Por Adrián Mendoza Salazar
Tihuatlán
Debido al constante incremento en los precios de la madera, además por la falta de lugares donde se pueda adquirir, legalmente, carpinteros tienen que seguir comprando este producto de manera clandestina, sobre todo, en los ejidos y municipios aledaños con el riesgo de ser detenidos.
Mencionaron que en los últimos años, ante los altos costos que tiene la materia prima en el mercado, el cedro rojo se encuentra protegido por las normatividades de la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) y se les hace imposible conseguir buen precio.
Los integrantes de la Asociación de Muebleros de Tihuatlán destacaron que para muchos de ellos es imposible comprar la madera de forma legal, ya que esta tiene un alto costo y además que trasladarla hasta sus áreas de trabajo representa un gasto mayor, provocando mermas en su economía.
Afirmaron que para la gran mayoría de las personas que se dedican a la fabricación de muebles en el municipio, prefieren adquirir la madera bronca, la cual es procesada, principalmente, en los ejidos, la cual es de calidad, pero a un bajo costo.