Rodrigo Barranco. Boca del Río, Ver. Personal jurídico de Liconsa llegó a la sede del Ayuntamiento de San Andrés Tuxtla para embargarlo debido a el adeudo de un millón 700 mil pesos, que dejó la pasada administración de Rosendo Pelayo.
Tras varios minutos de dialogar, el alcalde Octavio Pérez Garay logró convencer a los funcionarios federales para que no hicieran enajenación de bienes.
Bajo la premisa de que el Ayuntamiento no se niega a pagar, el edil prometió que analizarán las finanzas para liquidar, sin embargo, de todos modos, hubo valoración de bienes para checar qué podría cubrir el adeudo.
La sentencia fue girada por un juez federal el 18 de septiembre del 2017, pero apenas intentaron ejecutarla esta mañana en el Palacio Municipal.
La cantidad de briks de leche que se debe es de 600 mil, de 250 miligramos cada una, de las cuales se descubrió que sólo surtieron 486 mil.
Los representantes de Liconsa eran los abogados Delfino Mendoza Tejeda y David Pérez Márquez, quienes dijeron que darán seguimiento al caso.