Rodrigo Barranco. Veracruz, Ver. Entre enero y mayo de 2016 se importaron 6 millones 465 mil toneladas de maíz y para este año podría darse un aumento en el volumen de compras, por ello los productores deben comenzar a ver la semilla genéticamente mejorada que permitirá mayores beneficios con la siembra y cosecha ante el encarecimiento de los productos del campo.
Francisco Ugalde, investigador del Inifap del Campo Experimental Cotaxtla, dijo que México generalmente es un país importador de maíz pero la tecnología nacional puede aprovecharse para obtener rendimientos.
“Una semilla mejorada no llega a costar más de mil pesos cuando otras de marcas extranjeras llegan a costar más de 2 mil 500 pesos. En el proceso de producción de semilla se han generado más de un millón de jornales. La semilla esta creada con elementos nativos y es más resistente, la derrama económica ha sido de más de 14 mil millones de pesos”.
Dijo que en los últimos diez años se produjeron 214 toneladas de semilla de alto registro, adquiridas por 20 empresas mexicanas que produjeron 37 mil 500 toneladas de semilla certificada para sembrar 750 mil hectáreas con la participación de un millón de productores distribuidos en 16 estados del país.
La fase generó más de un millón de jornales para producción de semilla certificada y significa un ahorro de 28 millones de pesos en el costo de la semilla.
“En una década ha generado seis materiales genéticos y fueron sembrados en 750 mil hectáreas generando rendimientos de 160 por ciento, es decir, no necesitamos tecnologías externas cuando tenemos tecnología”.
Con el uso de nuevos maíces se incrementó el rendimiento en 161.9 por ciento el rendimiento por hectárea, lo que significó un volumen de producción de 3 millones 750 mil toneladas de grano.
La derrama económica global durante los diez años se estimó en 14 mil 63 millones de pesos que en términos de la inversión realizada para la investigación por el Campo Experimental Cotaxtla representó una relación costo-beneficio.
“Son maíz nativo con tolerancia a los vientos, cuando hay vientos no se acuesta, también resiste enfermedades peligrosas y el productor puede adquirirla. Es un beneficio social, económico y agroindustrial”.