Agencias. Jamapa, Ver. Cuando Marlene Camareno Pulido y su familia escuchan que puede comenzar a salir de su cauce el río Jamapa, comienzan a subir todas sus pertenencias a ladrillos y otras trampas para evitar que se mojen.
Cada año, las crecientes dejan inundaciones en los terrenos que están a su alrededor impidiéndoles la salida por hasta una semana, pero además ingresa a las viviendas provocando la pérdida de algunas pertenencias y que deban dormir entre el agua.
“Se nos metió el agua como de 40 centímetros y afuera nos daba como un metro 10, un metro 20 (…), revisan y revisan las casas inundadas según pero para allá no van, ya saben que se inunda y no van”, señaló Marlene quien habita en la comunidad Las Puertas.
Además, cada año tienen la misma solicitud para las autoridades municipales y estatales pero esta no es atendida.
Ella y otras cinco familias que viven en la misma zona de la comunidad solicitan una alcantarilla de drenaje pluvial que envíe el agua hacia otro sitio evitando que se atasque, pero no la construyen.
“Cada vez que vienen políticos lo pedimos y cuando andan en campaña dicen que sí pero no lo hacen”, comentó otra de las vecinas inundadas.
“Así anduvimos y todavía nos siguen las afectaciones, a nosotros no nos baja el agua, el agua ahí permanece como siete días, porque nos hace falta una alcantarilla que nos vote el agua para que nosotros no tengamos que pasar con esa agua, ahí se pone hasta verde el agua”, señaló Marlene.
Durante la noche del domingo, con el agua al interior de las viviendas, las personas ingresaron pero hacían guardias por si detectaban que el río comenzaba a elevar su nivel, salir rápidamente de allí.
“Nos pasamos velando, nos subimos con mi suegra que está un poquito más alto pero nos pusimos a velar, unos velaron un tiempo, otros dormíamos y otros estábamos, porque teníamos miedo que nos entrara más el agua”, comentó.
Sumado a la inundación y tener que caminar entre el agua, estas familias padecen otras dificultades pues pozos y las fosas sépticas se llenaron del agua del río y ahora no tienen agua potable ni pueden acudir al baño.
Ellos se quejan de las autoridades pues aunque está habilitado un albergue a tan solo unos metros, señalan que este fue colocado muy tarde y no a todos los invitaron.
Sin embargo, no son los únicos con esa queja ya que Reyes Flores Rodríguez y su familia dijeron que tampoco tuvieron atención rápida de las autoridades aunque su casa se inundó.
“Apenas ahorita (al otro día), la verdad ni supe del refugio, hasta ahorita que salimos”, señaló.
Fuente: AVC