Agencias. Boca del Río, Ver. Con pocas personas, se realizó el paseo de la virgen de Santa Ana por el río Jamapa.
A diferencia de años anteriores en que la gran cantidad de lanchas, pescadores, autoridades y turistas se veía navegando el río mientras se deposita la tradicional ofrenda, en esta ocasión fueron pocos pero muy devotos quienes asistieron.
“La sociedad está materializada, estamos migrando de lo espiritual, pero esta es una oportunidad también, no nos vamos a quedar cruzados de brazos como espectadores pasivos”, indicó el párroco de la iglesia, Cecilio Herrera.
Comentó que en la sociedad actual existe mayor interés en participar en otro tipo de eventos, como los artísticos, pero ya no en situaciones de carácter religioso.
“En las fiestas o en los eventos artísticos hay mayor participación de la comunidad que en los eventos religiosos”, añadió.
Explicó que Santa Ana, según la tradición, es la madre de la Virgen María por lo que resulta muy importante para los boqueños esa celebración.
Además, dijo que recuerda a los abuelitos por lo que toma mayor importancia debido a que actualmente estos sufren de abandono.
A pesar de las pocas personas que participaban, estas, siguiendo con la tradición hicieron una peregrinación hasta llegar a las pequeñas embarcaciones.
Este año fueron lanchas de pescadores, con austeras decoraciones, las que portaron las imágenes religiosos por el caudal del río.
Algunas personas se subieron a las lanchas de los otros pescadores que gustosos acompañaban la bendición.
Mientras, desde la orilla, uno que otro turista miraba extrañado la peregrinación marina.
Fuente: AVC