Redacción. Boca del Río, Ver. La Fiscalía no consideró urgente el caso del niño que había escapado de una presunta red de trata de personas, por lo que no se llamó al momento a los peritos y éste tuvo que regresar.
La Fiscal Coordinadora Especializada en Investigación de Delitos de Violencia contra la Familia, Mujeres, Niñas y Niños y Trata de Personas, María del Consuelo Lagunas Jiménez, informó que aunque se presentó en la madrugada el niño solo dijo que era maltratado y lo obligaban a vender, por lo que no se llamó a los peritos al momento.
“Tenemos una triada de peritos en nuestra Fiscalía (…), si nosotros ponemos a trabajar 24 horas a la psicóloga, a la trabajadora social y a la médica, lo que hacemos es que trabajan todo el día y están disponibles por si surge alguna emergencia, en el caso de que llegue alguien con una lesión que sea urgente que se atienda (…), el niño no venía maltratado, no tenía lesiones simples y tampoco refiere venir con lesiones”, comentó.
“El niño no refiere que tiene una relación con un grupo que lo traten, lo exploten”, aseguró.
Cabe señalar que el DIF de Boca del Río informó que el menor llegó a pedir ayuda con una señora después de escapar de una red que hacía que vendiera en la calle pero este fue sustraído de su vehículo cuando tuvieron que regresar con los peritos.
Lagunas Jiménez señaló que requieren de mayor personal para evitar que las personas que son víctimas de un delito tengan que dar tantas vueltas.
Además, la Fiscal sostuvo que según la declaración del DIF, las personas que se lo llevaron dijeron conocer a su tío.
Sin embargo, dijo que previamente en su declaración el menor había comentado que su tío era la persona que lo hacía vender en las calles y lo maltrataba físicamente.
Comentó que no tienen conocimiento que exista una red dedicada la trata de personas en la zona, pues aunque han tenido algunos casos en la entidad pueden ser aislados.
Lagunas Jiménez sostuvo que la prioridad actualmente es localizar al niño pero además se sigue con las investigaciones sobre la red.
Afirmó que la alerta Ámber, emitida 36 horas después de la desaparición del menor, no fue declarada con tardanza.
Aseguró que es un procedimiento normal que demoren tanto tiempo ya que deben tener la certeza de que el menor se encuentre en riesgo y estaban analizándolo.
Además, dijo que el DIF boqueño demoró en entregarles la fotografía con buena calidad y no había ningún familiar que pudiera solicitar la alerta, a pesar de que en esos casos todo el procedimiento se realiza de oficio.
Fuente: AVC