26 de Noviembre de 2024
Director Editorial Lic. Rafael Melendez | Director General - Dr. Rubén Pabello Rojas

Detectan casos de cutting en Boca del Río    

*Esta conducta consiste en que jóvenes en edades de entre 11 y 25 años, se hacen daño deliberadamente y a escondidas, para superar ansiedad o algún otro problema

 

 

Andrés Salomón Pérez

 

Boca del Río

 

Hasta el momento se han detectado en la ciudad de Boca del Río cuatro casos de cutting en jovencitas de secundaria, durante mayo, así lo reconoció la directora del Instituto Municipal de la Mujer (IMM), María Josefina Gamboa, quien dijo que se está dando apoyo a los menores afectados.

 

“En el mes de mayo el Área de Psicología aumentó su atención con el tema del cutting, en algunas escuelas secundarias del municipio de Boca del Río, donde se detectaron a jovencitas heridas”.

 

La titular del IMM señaló que ya se está atendiendo psicológicamente a estas personas, de entre 12 y 16 años de edad, en el Instituto, junto con sus padres, para saber cuál es el motivo de hacerse daño, si por lastimarse o puro placer.

 

“Son cuatro casos los que al momento hemos detectado, en menores, con edades de 12 a 16 años; gracias a sus mamás que asisten a los programas que tenemos, ellas son quienes nos avisan de esos casos”.

 

En ese sentido, explicó que el objetivo de estas prácticas es provocar sufrimiento físico para sentir un alivio del dolor psicológico o simplemente placer momentáneo.

 

“Esta situación la hemos detectado en colonias como en la Carranza, donde se ha presentado el mayor número de casos; es de las colonias más pobladas del municipio”.

 

Gamboa Torales explicó que psicólogos del Sistema de Desarrollo Integral de la Familia (DIF), así como el procurador de la Defensa del Menor, están atendiendo ese problema con pláticas en las escuelas en que se dieron los casos.

 

“No podemos dar los nombres de la escuela, porque tanto maestros, padres de familias y menores, están atendiendo esos casos; pero se va a superar ese problema que se presenta”.

 

Finalmente, detalló que las personas que son más propensas a realizar esta práctica, son aquellas que padecen depresión, ansiedad, estrés, soledad y aislamiento.