Rodrigo Barranco Déctor
Veracruz
Los cuatro detenidos por la muerte de la joven Columba Campillo fueron llevados al expenal de Allende, para ratificar su declaración el juez primero de Primera Instancia.
Uno por uno fueron presentados por las autoridades; la primera fue Ileana Mortera Trolle, quien ratificó su declaración y la amplió, al decir que es inocente, que ella no conocía a la estudiante de la Universidad del Valle de México (UVM).
Sin embargo, reconoció, en el mismo expediente, que era amante de Agne Tonatiuh García Albuerne, principal sospecho de ser el autor intelectual del crimen; además, dejó ver que sospechaba de él, porque usaba ropa y perfumes de marca, sin tener un trabajo formal.
“Siempre me extrañó que se comprara un Jetta, el cual a mí me decía que estaba nombre de su mamá; sin embargo, yo siempre le vi tanto ropa como perfumes de marca, lo que a mí se me hacía raro, que a pesar de que en ese momento no tuviera trabajo se diera esos lujos; y siempre se excusaba que su mamá se los daba o se excusaba que su mamá le daba algunas guardias en el hospital donde trabaja”.
Y continuó: “Otras de las situaciones que a mí se me hizo raro, fue que ese año Agne Tonatiuh García Albuerne se fue a vivir a la Cuidad de Puebla, rentó un departamento donde en ocasiones nos veíamos; sin embargo, aproximadamente, en el mes de febrero de este año, se me hizo raro y sospechoso observar a un amigo de Agni, de nombre Johnny, que sé que es de Veracruz y el cual se quedó a vivir una semana con Agni, situación que se me hizo sospechosa”.
Por su parte, García Albuerne ratificó de manera parcial su declaración ante el juez primero de Primera Instancia de Veracruz, en donde afirma que la decisión de matar a la menor fue por las publicaciones que él y sus cómplices vieron en Facebook.
El acusado, además, aseguró que su pareja sentimental, Mortera Trolle, siempre estuvo al tanto del secuestro de la estudiante, aunque ella lo negó en los Juzgados.
García Albuerne fue el tercer detenido en pasar a la Mesa Segunda a declarar ante las autoridades competentes; ahí, ante decenas de reporteros, se leyó parte de su declaración ministerial, en la cual relata cómo dieron muerte a la jovencita.
Según sus palabras, la intención de él y sus cómplices —Jhony Ruiz Inclán y Jesús Eduardo Castellanos—, era secuestrar a una mujer, habitante de la zona de la Riviera Veracruzana, quien estudiaba danza en la avenida Urano; sin embargo, debido a que ésta se dio cuenta a la hora del intento de secuestro, decidieron desistir y se fueron con rumbo al fraccionamiento Costa de Oro.