Sin embargo, con el paso del tiempo, algunos comerciantes decidieron cerrar sus negocios, pero antes de irse vendieron o traspasaron sus locales a otros locatarios.
El problema es que la compra y venta o simple traspaso se hizo, sin el consentimiento del Ayuntamiento, lo que ha generado que el Mercado Municipal quede en manos de unos cuantos locatarios, los cuales ha convertido en bodega los comercios bloqueando con ello, que el comercio se desarrolle en el interior del edificio.
En un recorrido por el interior del Mercado Municipal, se logró constatar que los locales marcados con el número, 16, 19, 20, 30, 32, 33, 54, 56, 60, 63, 77, entre otros que suman 21 los locales, son utilizados como bodegas cuando se supone que deberían ser utilizados para el desarrollo del comercio.
Esta situación, no termina ahí sino que los locatarios que se han adueñado del más de 50 % del mercado utilizan 5 locales más para su mercancía al igual que los pasillos del interior del inmueble. Lo peor es que no cumplen con el pago de la renta, al grado de que deben hasta 3 y 2 años, de atraso.
Por otro lado, comerciantes ambulantes situados en la cancha del Mercado Municipal, llaman al alcalde Marcelino Flores Nava, para que realice una depuración en el arrendamiento del inmueble ya que ellos como ambulantes también tienen derecho a formar parte de la Unión de Locatarios, pero sobre todo se les dé la oportunidad de rentar un local para desarrollar sus actividades de comercio de manera legal.