Fueron los padres de familia de la escuela primaria Vicente Guerrero quienes denunciaron que las autoridades educativas del plantel impiden la inscripción de más alumnos en el sitio, además de que no les dan no cabida a menores con capacidades diferentes.
En este tenor tomaron la dirección del plantel y lo llenaron de cartulinas, no conformes, soldaron la reja, por lo que el acceso al sitio era totalmente nulo.
La tesorera de la organización, Luz María Bosques, explicó que la directora Nancy Ramos Rueda, quien apenas tiene un año al frente del plantel, no ha resuelto esta problemática y se empeña en no preinscribir a más de 17 alumnos por aula.
"Eso es discriminación, sobre todo para los niños que tienen algún tipo de discapacidad, aquí hay espacio suficiente, otras escuelas tienen hasta 40 o más alumnos por salón, aquí no quiere aceptar a uno o dos más", informó.
Dijo que esta primaria cuenta con una Unidad de Servicios de Apoyo a la Educación Regular (USAER), a pesar de ello no lo utilizan al 100 por ciento, pues la directora no da cabida a que nuevos alumnos se inscriban.
"Vamos a entablar pláticas, le haremos del conocimiento a los demás padres, y de ahí se tomarán decisiones, queremos que se brinden más espacios a los alumnos que desean ingresar aquí", aseveró.
Por su parte, Iván Espinoza Romo, padre de familia, consideró que el comité no tiene capacidad para tratar este tipo de asuntos, incluso calificó como una niñería el que cerraran la dirección educativa hasta con soldadura.
CASTIGADOS POR TRAER PIOJOS
Por su parte, siete niños terminaron con insolación luego que una maestra de la primaria Francisco H. Santos los sacara del salón, presuntamente por tener piojos y liendres.
Al respecto, padres inconformes por la situación dejaron al descubierto que la forma de conducirse de la profesora Ileana Peña es habitual, no obstante, ésta nunca ha recibido sanción alguna por la manera en que trata a los menores.
Uno de los padres inconformes que permaneció en el anonimato por miedo a represalias comentó que la maestra no conforme con sacar a los pequeños, les llenó la cabeza de vinagre, con la intención de que los piojos desaparecieran.
"Los niños que expuestos ante los demás pequeños fueron puestos bajo el sol por un largo periodo, todo porque supuestamente tenían piojos y liendres", dijo uno.
Por la situación algunos llegaron a casa con dolores de cabeza y presentaron temperatura al día siguiente.
"Cuando llegué por mi hijo salió bañado en vinagre, todo rojo, con la cabeza caliente, me dijeron que fue porque según tiene piojos, y eso no es verdad", aseguró un padre de familia.
Esta situación provocó que los padres lamentaran el actuar de la profesora, explicaron que continuamente en el plantel se dan pláticas sobre bullying, y justamente eso es lo que hacen los maestros.
Los padres de los agraviados manifestaron que esta situación será denunciada formalmente ante la delegación regional de la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) o la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), de ser así esperan que la maestra reciba la sanción necesaria para que esto no vuelva a ocurrir con otros pequeños.