EL UNIVERSAL
CIUDAD DE MÉXICO
Este viernes para Red Bull terminó como un tremendo dolor de cabeza y es que en las dos prácticas libres tanto Sergio Pérez como Max Verstappen no dejaron de quejarse por la radio de lo incómodo que sintieron el RB19, tanto así que en la FP2 el mexicano terminó séptimo y el neerlandés octavo.
Primera vez en el año que se ve esto con la escudería austriaca, pues desde que inició la temporada al menos uno de sus volantes peleaba por los mejores tiempos en los libres.
Pero mientras esto sucedía con los toros en el complejo circuito de Marina Bay en Singapur, los que le sacaron potencial a su monoplaza fueron los Ferrari, con Carlos Sainz con el mejor tiempo (1:32.120) y Charles Leclerc en segundo (1:32.138).
El tercer mejor cronómetro lo marcó el británico de Mercedes, George Russel, con 1:32.355.
Este sábado será día de la última práctica y turno de la clasificación, en la que se espera que Red Bull regrese a la normalidad y supere esos problemas que le hicieron pasar un trago amargo.
Además, para Sergio Pérez será vital mostrar por qué le apodan el rey de los callejeros y es que el año pasado ganó en ese lugar y estará celebrando 250 Grandes Premios disputados en la máxima categoría.
"Hay muchas áreas que debemos revisar para conseguir la mejor configuración posible en el auto, la qualy es muy importante aquí en Singapur; no pensamos que Ferrari estuviera tan fuerte aquí, lo principal por hacer es mejorar el equilibrio", apuntó el mexicano ante la prensa tras las actividades del día uno en la breve gira por Asia del Gran Circo.