EL UNIVERSAL
CIUDAD DE MÉXICO
En dos meses se cumplirán tres años desde la llegada de Tom Brady a los Buccaneers de Tampa Bay, franquicia que cambió su historia desde la llegada del mariscal de campo. Mientras tanto, el equipo que vio consagrarse como el mejor de todos los tiempos, los Patriots de New England, viven en un infierno desde que se les fue el gran héroe.
El cambio de franquicia marcó un antes y un después tanto en la carrera de Brady como de los equipos involucrados. Mientras Tampa festeja su segundo título del Sur de la NFC consecutivo y conquistó el Super Bowl hace tres años, Nueva Inglaterra entró en crisis y tuvo que experimentar con Cam Newton, Mac Jones, Brian Hoyer y Bailey Zappe para encontrar al sustituto de Tom.
Actualmente, Mac Jones se consolidó como el nuevo mariscal y referente de la franquicia. Sin embargo, desde el anillo obtenido por los Pats en 2018, no han vuelto a ganar un solo partido en postemporada de la NFL.
Esta temporada, el equipo dirigido por Bill Belichick se jugó la última carta por un lugar en playoffs en el partido final de temporada regular ante Buffalo y lo perdió. En cambio, Brady lleva tres años consecutivos liderando a los Bucs en la pelea por el título.